De lo bueno, poco

A todas nos gusta salir de compras y adquirir una prenda nueva o un par de zapatos. ¿Pero realmente sabemos comprar? .
Cuánto de lo que compramos termina guardado por no tener con qué combinarlo. O luego, esa prenda que se nos veía estupendo en la tienda, en casa no nos gustó.
Somos indecisas muchas veces a la hora de comprar y compramos por impulso, o porque la amiga que nos acompaña nos dice que nos vemos genial, pero no era nuestro estilo.
Tómate tu tiempo para conocerte a ti misma y conocer tu estilo. Búscalo en revistas, tiendas y, sobre todo, en Internet, donde la cantidad de información es casi infinita.
También nos ocurre que nos compramos una prenda acorde a nuestro estilo, pero cometemos el error de comprarla cuando ésta es de mala calidad, lo que implicará que se deforme o descosa en los primeros lavados, habiendo gastado todo ese dinero para ocuparla sólo una vez.
Por esto, prefiere las prendas de mejor calidad, que te den placer al contacto con la piel y que no te la irrite. Que tenga una tela liviana de buena caída, que te haga ver bien y que sus diseños sean originales y bonitos, para que te hagan destacar.
Y, como dice el dicho: “Más vale poco y bueno, que mucho y malo”.

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